Lourdes Solís de Vara
“Agradezco a la vida haber sido una madre especial y una mujer comprometida con las causas nobles”
Por Esteban Torres
PRIMERA PARTE
La historia de Lourdes…
“Soy originaria de la Ciudad de México donde viví hasta los 14 años, mis padres nacieron en Mérida, Yucatán donde pasé dos años, y después me trasladé definitivamente a Cancún, era 1979 y desde entonces he vivido aquí, así que soy más cancunense que de otro lado”
Cómo visualizaste tu vida en tu juventud…
“La familia siempre ha sido muy importante para mí, definitivamente me veía como mamá, casada y con muchos hijos, pero también me veía como una mujer ejecutiva, me gustaba estudiar y pensaba cursar una carrera: leyes, por ejemplo. Creo que muchas cosas se han cumplido en su momento, además desarrollé una parte altruista que me ha dado muchas satisfacciones”.
El hombre indicado… ¿Cómo imaginabas a tu compañero de vida?
“Siempre soñé con un hombre al que pudiera admirar. Y así es exactamente mi esposo Abelardo Vara, tiene muchas de esas cualidades. Nunca me gustó el dicho: Detrás de un gran hombre hay una gran mujer, creo que es mejor: Al lado de un gran hombre hay una gran mujer, los dos compartiendo todo, desde el hogar, los logros profesionales, caminando juntos y apoyándonos mutuamente”.
La maternidad: primera bendición Daniela…
“Un sueño hecho realidad, decir su nombre es sinónimo de milagro, de alegría. Fue una niña muy deseada, lo que no sabía era que mis embarazos eran de alto riesgo y debía tener muchos cuidados.
Segundo regalo: Ivana…
“Entre los viajes de Abelardo y el tema de mis embarazos, dejamos pasar tres años para encargar a Ivana, que fue la confirmación de mi maternidad, con ambas viví muchos momentos maravillosos. Cancún era muy familiar y gracias a ellas conocí algunas de mis mejores amigas cuyos hijos eran los amigos de mis hijas”.
Misma madre para dos hijas con necesidades diferentes: un problema, un doble esfuerzo o un reto…
“Fue un reto, nunca un problema, fue un desafío muy fuerte que sacó de mí toda la fortaleza que llevaba dentro y fue un desafío a conquistar con mucho amor; un hijo especial involucra a toda la familia, dejas de pertenecer a un núcleo común, a lo mismo; mientras los niños van avanzando en el tuyo vas descubriendo las capacidades que puede desarrollar; en mi caso fue diferente porque específicamente en el caso de Ivana hubo un antes y un después, y entender eso fue un proceso largo que terminó en un gran aprendizaje; si hoy evaluara mi vida sólo encuentro amor y agradecimiento”.
Si bien las mujeres nacen sin un tutorial de maternidad que puedan descargar al momento el convertirse precisamente en madres, cómo te preparas para este nuevo reto…
“Definitivamente ser mamá es una bendición y aprendes a serlo con el tiempo y la experiencia. Cuando se presentó este tema en mi vida me di cuenta que no estaba llenando las expectativas de mamá de Daniela ni mamá de Ivana, ni de mi vida, fue un desequilibrio para todos. Ahí se consumó mi filosofía de vida: La verdad te hace libre, así que necesitaba estudiar, prepararme y afortunadamente escuché de un diplomado en el Cumbres de Psicopedagogía de la familia, que me ayudó mucho, así como conocer familias con hijos con capacidades diferentes, así conocí a doctor y gran especialista: Pablo Valdés que dio el curso de Neuropsicología para padres del que aprendí mucho de los diferentes daños o disfunciones cerebrales o discapacidades de aprendizaje, para mí todo era desconocido, así como los términos para referirse al tema”.
Si bien todo este tiempo descubres nuevos horizontes a través de la maternidad, de alguna manera adquieres experiencia para ayudar a otras madres…
“Definitivamente sí, por lo que te repito, sólo tengo agradecimientos a la vida por esta maravillosa oportunidad. Esto me lleva a estudiar una licenciatura en educación y después quería especializarme en Educación Especial, pero descubrí la Psicoterapia Gestalt y me llamó más la atención porque así encontré muchas respuestas, y por Ivana me seguí preparando en todos los temas que involucraban su caso; conviví en una comunidad de padres como yo de niños especiales -o espaciales como decía Ivana-, eso me ayudó a encontrar mi sentido de pertenencia, siempre he creído que las cosas que más amas son posibles, me prometí que ella tendría una vida feliz y que fuera lo más independiente posible”.
La partida de Ivana. Al convertirse en un ángel te deja un cúmulo de recuerdos para plasmar en una obra que pronto verá la luz…
“Perder un hijo es algo muy fuerte, te quita un pedazo de tu alma. Otra de mis frases favoritas es: Gracias a la vida que me ha dado tanto, Ivana me fue preparando para muchas cosas, venció muchos obstáculos de los que dijeron que no podría superar: leer y escribir fue lo primero, entre otros logros, incluso llegó a crear su propia empresa con sus Ivana´s Cookies, hasta convertirse en la Chef Ivana -quienes la conocieron, así la recuerdan-; coincidió con su partida el término de mis estudios que incluyeron entender el duelo y el día que partió me convertí en la columna de la familia porque todos estábamos devastados, pero era mi responsabilidad ayudarlos. Recuerdo que en una de las misas que le organizaron mis amigas a mi hija descubrí la huella que había dejado Ivana y pensé en la que algún día iba a dejar yo. Ese día decidí que iba a honrar su memoria contando su historia empezando por el final. No sabía cómo. Pero necesitaba plasmar ese agradecimiento por haberla tenido en mis brazos y en mi vida”.
“Desde el primer momento que vi los avances de Ivana, en mis adentros pensé en todos los conocimientos que necesitaba convertir en una especie de manual, yo necesitaba hacer algo que ayudara a los demás con mi experiencia, y si de algo servía compartirlos me iba a sentir muy afortunada. Lo primero que pensé fue hacer una escuela y seguir abriendo toda esta parte de la vida independiente para ayudar a más niños especiales. El Colegio Diuni nos dio la primera oportunidad pero después llegó la pandemia. Cerró la escuela. Posteriormente pensé en abrir un kínder, pero no me sentía con mucha fuerza. Hasta que se dio la oportunidad de abrir el colegio Ainara by Kali, en donde tenemos la parte de inclusión.
“Durante la pandemia y el consabido encierro se reforzaron las ganas de escribir todo eso que viví con Ivana y ya sin ser un estudio, ni un manual, se convirtió en una autobiografía sin involucrar conocimientos clínicos ni médicos, es simplemente una historia llena de logros y muchas bendiciones”.
SEGUNDA PARTE
Nace Damas Hoteleras, el origen y el objetivo…
“A raíz de mi matrimonio con Abelardo, descubro que como presidente de la Asociación de Hoteles y del Club Skal, los hombres se conocen y conviven, pero las esposas no; el día que se celebró la posada de los hoteleros descubrí que nadie se conocía, así que le platiqué mi idea a Anamari Irabién, quien era esposa del vicepresidente de las mismas asociaciones, así que replicamos los cargos con las esposas de la mesa directiva y así nació el grupo de Damas Hoteleras de Cancún, del que soy la fundadora y primera presidenta. Al principio nos reunimos cada mes para conocernos, Cancún era muy joven, después empezamos a hacer labor social apadrinando niños donando leche y posteriormente abrigamos otras causas. Después empezaron los eventos tradicionales como el de Brujas y Catrinas a beneficio de Cruz Roja Cancún y posteriormente el Desayuno Mexicano, a beneficio de bomberos, así como el desayuno de navidad para ayudar al DIF Municipal. Actualmente anexamos dos eventos institucionales: el Baile de Carnaval, del color de la institución que apoyemos y derivado de nuestro eslogan surgió un evento especial dedicado a mujeres ilustres que titulamos “Abriendo caminos que dejan huella”. Actualmente retomé la presidencia”.
La transformación y evolución de un grupo y las réplicas hacia otras necesidades…
“Definitivamente nuestro objetivo y misión ha sido ayudar. Anteriormente se hacían más desayunos, pero hemos decidido reducir nuestra actividad para darle oportunidad a otros organismos o asociaciones para que también convoquen a la comunidad y los apoyen. Cancún es muy grande ahora, han surgido nuevas necesidades, nosotras como grupo no podemos abarcar todo lo que quisiéramos, así que mientras más seamos los que ayudemos, mejor calidad de vida tendremos ayudando a quienes lo necesiten”.
Retomar las riendas a 40 años de su formación…
“Me siento muy agradecida con todas mis amigas que han creído en este proyecto, así como por por las que han participado y dirigido nuestro grupo durante tanto tiempo; todas tenemos en el corazón ese deseo de ayudar y eso es lo que nos ha unido y por eso seguimos, ya casi cumplimos 40 años”.
INTIMIDADES
¿Cuáles son las joyas más valiosas de Lulú Vara?
“La vida misma, cada día tiene su propio baúl con muchas joyas preciosas”.
¿El lujo que no tiene precio?
“La salud”.
¿Lo que más disfrutas todos los días?
“Abrir los ojos y ver el mar”
¿Las huellas que nunca borrarías?
“La experiencia de ser una madre especial”.
¿El paraíso en la vida de Lulu?
“Estar en el presente, abrazar la vida, estar bien contigo mismo y dar lo mejor de ti, a pesar de los desafíos”.
Lo que cambiarías si pudieras regresar el tiempo…
“Lo que he vivido es la semilla de lo que soy hoy”.
Las metas pendientes…
“Las metas se cumplen cada día, no hay que perder el entusiasmo por la vida”.
¿Cómo te gustaría que Cancún recordara a Lulú Vara?
“Espero que mis acciones sean reconocidas como el gran agradecimiento que le tengo a la vida que me ha visto crecer, que me ha visto llorar, ser feliz como madre, esposa, amiga y abuela, así como a esta tierra que me ha dado tanto. ¡Gracias!”