“Mi carácter se forjó por mis vivencias, por lo que estudié, por lo que me he preparado, por compartir experiencias y aprender de otras personas; quién soy yo hoy, es por lo que he vivido; si hubiera algo que pudiera quitarlo no lo borraría porque si no, no sería quien hoy soy”.
Por Esteban Torres P.
PRIMERA PARTE: DISEÑANDO UNA VIDA…
¿Cómo visualizaste tu vida cuando eras niña, adolescente y posteriormente cuando llegó el momento de darle la bienvenida a la maternidad…?
“Siempre me vi en familia, casada con hijos, llevándolos a los partidos, con una familia grande. De chavita tenía unos planes firmes: prepararme, estudiar, y estudiar fuera, pero no me dio tiempo, porque mi papá nunca nos dejó a mí y a mi hermana estudiar más de seis meses fuera, porque tenía el temor de que conociéramos un extranjero y nos fuéramos del país, pero aún así estuvimos en varios lugares. Cuando terminé mi carrera me reencontré con Christian -mi esposo-, mis abuelos eran amigos de sus abuelos y mis papás de sus papás; cuando lo volví a ver después de muchos años, me dijo mi hermana: Platica con este hombre, es como tú; lo vi, platicamos, y cuando se fue le dije a mi hermana: Con él me voy a casar, y así fue, anduvimos cuatro años; no me dio tiempo de hacer mi maestría de diseño de joyería, yo quería irme a Italia. Un día le pregunté a Chris si quería que siguiera estudiando o qué hacíamos, y el me dijo mejor nos casamos y así fue.
“Después llegó la maternidad, muy planeada como todo, con un capítulo muy difícil en mi vida. Llegó Sofía, mi primera hija que está en el cielo, ella llegó con Síndrome de Turner, que es un cromosoma menos; la maternidad me dolió muchísimo al principio, tenía mucho miedo de embarazarme de nuevo, sin embargo, después llegaron Patricio y Santiago, dos niños hermosos, pero siempre quise a la princesa de la casa y en el último embarazo llegó Michelle, con Síndrome de Down, que es un cromosoma de más, pero yo digo que es el que le faltó a Sofía”.
¿Eres de las personas que hacen planes a corto y largo plazo o prefieres que la vida te sorprenda como lo ha venido haciendo hasta hoy?
“Los grandes líderes siempre tienen una misión, objetivos y una visión clara, pero para llegar ahí se necesitan establecer objetivos a corto, mediano y largo plazo, pero dentro de ese proceso debes ser resiliente, viviendo el presente, acordándose del pasado y saboreandote el futuro con lo que venga, y estar consciente de los cambios que la vida da, y no por eso cambies tu forma de pensar o te pongas triste, porque la vida siempre te va sorprender, y cuando te cambia es por algo, por eso debes ser resiliente para ser tu mejor versión y convertir ese algo que no te gustó en algo positivo; la pandemia ya nos enseñó que de un minuto a otro tus planes se caen; sí es importante tener planes, saber cuál es mi camino, pero estar consciente que si hay cambios, estos son difíciles y debemos aprovecharlos para hacer con ellos nuestra mejor versión”.
Alguna vez mencionaste que buscabas en la vida una misión, una razón para justificar tu existencia y al final tuvo cara y nombre: ¡Michelle! Además de tus dos varones.
“Dos semanas antes de que naciera Michelle, veníamos Christian y yo en el coche y le dije que realmente no sabía cuál era mi misión de vida o a qué había venido a este mundo; él me dijo que yo siempre hago lo que quiero, vas, vienes y constantemente haces cosas nuevas y sí, pero no tenía clara mi misión y pasadas esas dos semanas nació Michelle”
Y con ello se definió un nuevo panorama…
“Se definió después de un proceso que empieza con una negación, nadie está preparado o por lo menos yo no, porque no sabía que venía con Síndrome de Down, fue un proceso de sentimientos encontrados, pero cuando cambié mi pregunta de por qué me pasó a mí a para qué me pasó a mí, encontré mi misión de vida”.
¿Cómo se forja el carácter y la personalidad de la mamá de una persona con discapacidad sin claudicar en el intento?
“Se forja a través de los errores, de las vivencias y de lo que te toca vivir; en la vida no todo debe ser rosa porque si no, no tendría chiste, el chiste es que cada matiz que llega a tu vida tú le des ese lado positivo, aprendas de tus errores y que saques siempre tu mejor versión. Mi carácter se forjó por mis vivencias, por lo que estudié, por lo que me he preparado, por compartir experiencias y aprender de otras personas; quién soy yo hoy, es por lo que he vivido; si hubiera algo que pudiera quitarlo no lo borraría porque si no, no sería quien hoy soy”.
¿De qué manera ajustas tu nueva vida y qué puertas se abren ante la apertura de este nuevo panorama…?
“Desde que abrí El Espacio de Michelle me cambió la vida completamente. Le di la importancia a los problemas que realmente la tenían, le di el valor que tenía la vida, con la salud, el amor, la familia, la compañía de amigos. Sí se abren puertas, pero también se cierran. A raíz de lo que he vivido he aprendido que, si se cierra una puerta, no tengo que buscar ni ventanas ni otra puerta, me aferro hasta encontrar la llave de la puerta que yo quiero abrir. Y El Espacio de Michelle me ha abierto muchas puertas -algunas yo no sabía ni siquiera que existían-, me han llevado también a compartir el conocimiento que he adquirido, a ser la voz de quienes no son escuchados, a poder formar, empoderar y formar líderes para que sean su mejor versión”
Y así como lo mencionas, te hemos visto dar la vida por El Espacio de Michelle. ¿Cómo ha sido su evolución a 10 años de su fundación?
“El Espacio de Michelle es donde he concentrado mi energía, sí, de mí para afuera, pero de mí para adentro tuve que aprender mucho sobre inteligencia emocional, a liberar endorfinas, ser lo que me gusta ser para ser feliz; ver la vida con alegría con fe y felicidad, ver la vida diferente. Retomé también la música y la pintura a partir de que nació Michelle; toqué el piano, después el cello, aparte de ser emprendedora y empresaria; todo eso ya es parte de mi formación y además ser persona vitamina para los que me rodean”.
Sientes que al crear este Espacio y sacar una personita adelante tu misión y tu razón de vivir está completa o tienes otros planes en mente…
“No puedo estar completa, yo nunca voy a estar satisfecha, siempre quiero más”.
SEGUNDA PARTE: INTIMIDAD…ES
Definitivamente eres una It Girl que muchas personas admiramos por tu estilo de vida, pero a ti te ha gustado llevarlo al siguiente nivel haciendo piezas únicas, irrepetibles y por demás originales. ¿Cómo desarrollaste y puliste ese estilo?
“Yo he pintado toda mi vida, pero eso era algo que era completamente mío; hay obra mía en mi casa, la de mis papás. La pandemia me llevó a convivir con mi familia al 100%; lo que Shantal, mi cuñada, vivía día a día era yo: mis manos, mi pintura, mi estudio; todo eso lo empezó a compartir porque le parecía increíble hasta que un día se me acabaron los lienzos, todo estaba cerrado, así que seguí con mi ropa como mis chamarras, mis jeans, mis playeras y mis camisas, y así surgió la idea de hacer mi marca y como tenía todo el tiempo del mundo, empecé a desarrollar mi carrera, mis especialidades; desde el logotipo, el estilo, escoger las telas, diseñar los botones, las etiquetas, los empaques, hasta completar todo el proceso de entrega a los clientes, porque todo es bajo pedido en línea y ese hobbie se convirtió en un negocio que cuido mucho para que no deje de ser mi hobbie, en el momento que me sienta obliga a hacer arte y tenga que quitarle tiempo a mis hijos, ahí paro, porque no quiero confundir mi pasión con el deber hacer de un negocio que es para hacerme sentir bien y se sientan bien los demás”.
El arte se ha convertido en un referente de tu nombre y de alguna forma ha pasado de lo íntimo a lo público. ¿Qué opinas al respecto?
“El que la gente conozca mi arte, mis obras, me empuja a prepararme más para entrar a otro nivel de exposición en donde ya mi parte íntima se conozca más y que la gente ahora sí pueda disfrutar de una obra de arte con algún estilo o técnica que provenga de mi corazón”.
¿Has creado alguna pieza que tenga un significado tan fuerte para ti que difícilmente le pondrías precio?
“Uuff, claro, la primera Virgen de Guadalupe que pinté está en mi sala. Yo soy super fan, es mi virgen favorita, me ha acompañado desde niña, desde Sofía y en todos los momentos más difíciles de mi vida la Virgen de Guadalupe ha estado conmigo. La pinté después de muchos años de no pintar retrato hasta poder darle la expresión que yo tenía de ella, por eso no tiene precio y no la vendo. Por otro lado, cada obra que pinto no la quiero ni entregar ni vender, cada obra que pinto es mi favorita; sé que no la voy a poder tener, pero también me hace feliz que los demás lo tengan, la verdad es que soy bastante desapegada”.
¿Actualmente creas libremente o por encargo?
“De las dos cosas, a veces me entra la inspiración a medianoche y me pongo a crear y a pintar, hoy mi vida profesional está divida en dos caminos: el artístico que es llevar mi arte al siguiente nivel, y la fundación El Espacio de Michelle para que siga viva; estoy trabajando ya en la franquicia con Impacto Social para llevarla a todo el país”.
En dónde te gustaría ver tus diseños: ¿en un gran aparador, en una pasarela, en la pantalla grande o en alguna personalidad?
“He tenido pocas oportunidad pero bastantes, específicas y grandes; mis obras han estado con personas importantes, famosas, conocidas; he expuesto en el Museo Maya próximamente en el Museo Soumaya, voy a estar en el libro de un escritor que se dedica a hacer libros de artistas mexicanas, y él me eligió a mí como artista mexicana que inspira, voy a compartir varias obras que he tenido; sin querer he estado entre personalidades, personas, artistas, casas, sin querer la vida ha llevado mis obras a varios lugares”.
El mundo ha hecho suya la frase “con causa”, ¿tus diseños lo tienen?
“Todos. Todos los cuadros, todas las chamarras, todo lo que pinto y lo que me encargan, todo lo que tiene arte, es arte con causa y un porcentaje va destinado al Espacio de Michelle”.
Si bien tus creaciones son obras de arte hechas a mano, has pensado de alguna forma en la fabricación en serie para llegar a un mercado más amplio o prefieres seguir así como estás?
“Alguna vez lo pensé, pero eso le quitará la esencia de lo que le pongo a cada chamarra, yo creo que me voy a quedar así porque mi finalidad no es vender cantidad, sino calidad, a personas que aprecian el arte o quieran tener una obra mía”.
TERCERA PARTE: LOS REFLECTORES
Ya tenemos claro que tu nombre es actualmente sinónimo de dos campos de acción totalmente diferentes: por un lado eres una persona altruista y solidaria con la comunidad Down y por el otro eres una creadora de moda con arte, cuál es el siguiente nivel tanto de uno como de otro?
“La pandemia me llevó a seguirme preparando, terminé una maestría en liderazgo estratégico internacional para dos cosas. Una: apoyar a mi familia en el ámbito político -backstage-, y Dos: para poder replicar El Espacio de Michelle en toda la República y lograr un mayor impacto social. Me considero un líder de acción positiva y cualquier líder lo que quiere en algún momento es trascender.
Entonces definitivamente podemos pensar en un Espacio de Michelle en otras partes de México y el mundo gracias al modelo educativo que has desarrollado…
“Totalmente, y si se puede internacional, pero siempre pienso en mi país primero”.
Actualmente se habla mucho de la “inclusión”. Desde tu punto de vista, en qué ámbitos se ha hecho válida y en dónde falta seguir trabajando para que sea este un mundo inclusivo…
“Creo que es un tema en el que yo veo todos los días las áreas de oportunidad que hay. Número uno la sociedad que, aunque se dice incluyente, necesitan abrirse más a tener una cultura de la discapacidad más moderna, más activa, el poder sembrar en las familias y en tus hijos que todos somos diferentes y que todos necesitamos ayuda, y que la discapacidad existe, y llega en cualquier momento y sin avisar. Número dos: en las escuelas. Lamentablemente teniendo posibilidades, me he topado con escuelas a las que les falta muchísimo y ahí es en donde trato de sembrar una semilla para poder ayudar en el desarrollo de la inclusión educativa, tanto en escuelas públicas como privadas. Es un modelo que realmente se tendría que reestructurar, pero para hacer eso primero tienes que hacer conciencia en los profesores, prepararlos, y saber que el niño no se adapta a la escuela, sino que la escuela se adapta a las necesidades del niño. Cuando cambiemos ese chip y las escuelas cambien ese chip, entonces va haber una verdadera inclusión”.
Sin buscar el reconocimiento público por tus logros sociales, ni ostentar la etiqueta de benefactora por la gran obra que has desarrollado, ¿cómo te gustaría que el mundo recuerde tu nombre?
“Pues como una mujer que siempre trató de dar lo mejor de sí misma para tener impacto y ayudar a los demás. Una persona que trabajó por el ustedes, no por el yo. Que se acuerden de mí como una persona que dejó huella y que sembró más en la inclusión de su país, en su entorno; una mujer que siempre luchó por sus ideales y no importan las veces que se cayó, siempre se levantó y todavía las que le faltan por caerse”.
