31 de mayo de 1944 / 23 de enero de 2021
Mi hermosa y preciosa mamá está ahora en los brazos de Dios junto a mi papá. Ella no sólo era la mejor madre que un hijo podía tener, sino también fue mi mejor amiga. Ella siempre dio a su familia todo de sí misma sin medida y fue una bendición para cualquiera que la conociera. Hoy me entristece profundamente que se haya ido, pero estoy agradecido de que ahora esté descansando junto a mi padre y se haya ido en paz.
Fernando Ficachi
Mi mamá, un ángel que Dios mandó para bendecir a los que nos tocó la fortuna de conocerla y amarla. La más cariñosa y mejor mamá, hermana, esposa, hija, amiga, madrina, tía y suegra del mundo. Siempre con una sonrisa y siempre poniéndote a ti primero que a ella. Tan preciosa y bella su alma como su rostro. El ejemplo de perfección en todos los sentidos.
Raúl Ficachi
Hoy el cielo recibe a un gran ser humano que fue una gran esposa, madre, amiga y hermana. Siempre te vamos a recordar elegante, hermosa y sonriente. Le doy gracias a Dios por la mejor suegra que me pudo mandar y nunca olvidaré el amor que me tuviste.
Carlota Chavarri
Elvia Ficachi, amiga de mi corazón, de mi alma, mi hermana, mi confidente. Te fuiste y me siento tan triste hoy que te di el último adiós, sabiendo que no te veré más y sabes bien que te extrañaré un montón, pero siempre te llevaré en mi corazón que nunca te olvidará. Se que ahora en el cielo estarás acompañada por tantos ángeles que se me han ido y a pesar de que sabemos que están con Dios gozando de su gloria, no deja de dolerme al saber que no los veré más disfrutando de su compañía. Descansa en paz mi querida amiga.
Toñita Aguirre
¡Hasta siempre querida Elvia! Mi hermosa amiga; te vamos a extrañar, te recordaré siempre tan cariñosa y sonriente.
Dulce Gobera
Elvia fue una mujer increíble que dejó una gran huella en nuestros corazones, hoy trasciende al paraíso donde seguramente nos enviará su bella energía, descanse en paz y brille para ella la luz perpetua. Fue un honor haber coincidido con ella en esta vida porque fue por mucho una gran mujer. Vuela alto y descansa.
Ana Mezcal
Querida Elvia: no tengo palabras para agradecerte el pedacito de tu corazón que un día me regalaste sin pedirme nada a cambio, simplemente me recibiste como un hijo más. Jamás olvidaré el día que me pediste que te permitiera ser mi mamá de Cancún y yo acepté feliz, porque ambos nos queríamos ya con ese afecto maternal, y aunque prometimos guardar un secreto, hoy he decidido compartirlo: “Yo te saludaré como HP para decirte ´hijo precioso´ y así no se sientan celosos mis hijos”. Y así fue y será por siempre; te instalaste en mi corazón y te convertiste en mi madrecita de Cancún y cada vez que nos veíamos corríamos a abrazarnos. Me sentí afortunado de ganar tres hermanos más. Nos hizo falta tiempo para disfrutar juntos de esa taza de café que se quedó pendiente, pero lo más hermoso fue encontrarte en este mundo y coincidir, decirte muchas veces cuánto te quiero y ahora también, cuánto te voy a extrañar.
Tu HP Esteban Torres P.
