Este jueves 16 de julio se cumplen 17 años del fallecimiento de la cubana Celia Cruz, la “Reina de la salsa”, una intérprete que conquistó el mundo entero con su música, carisma y sabor.
La cantante nació el La Habana, Cuba, con el nombre de Úrsula Hilaria Celia de la Caridad De La Santísima Trinidad Cruz Alfonso, y murió en 16 de julio de 2003 en Fort Lee, Nueva Jersey, Estados Unidos.
En sus inicios en la música, Celia Cruz formó parte de la agrupación La Sonora Matancera, pero con la llegada de la revolución cubana y Fidel Castro al poder, fue exiliada de su país y nunca más pudo regresar. Ni siquiera en las peores tragedias que pasó su familia. La cantante continuó su carrera con gran éxito, primero se instaló en México donde se consagró inmediatamente y después emigro a Estados Unidos comenzó su camino en solitario, su talento le permitió mantenerse en el escenario más de cinco décadas. Hizo alrededor de setenta álbumes, recibió múltiples discos de oro y cinco premios Grammy.
Desde los 10 años cantaba, pasaba horas haciéndolo. Cuando tenía 12 años cantó para un turista que quedó tan fascinado con su voz, que le regaló unos zapatos. Pese a su talento, su mamá quería que su hija fuera profesora y sí entró al magisterio, pero prefirió seguir su corazón.
Además de su voz y carisma, su look era clave de su éxito, siempre buscaba llamar la atención en el escenario con sus vestuarios llamativos y extravagantes, pero lo que más amaba eran los zapatos, de hecho puso de moda los tacones invertidos.
