Por Esteban Torres P.
La era que vivimos actualmente crea nuevas figuras con una facilidad inusitada, algunas divertidas, otras interesantes, pero todas llaman la atención porque una vez más se aplica la vieja frase que dice: “para gustos hay colores” y en ese sentido el mariachi Jesús Gama se ha convertido en toda una celebridad en el mundo, especialmente dentro de la plataforma TikTok.
Aunque fue en pandemia cuando su nombre e imagen se fortalecieron, su carrera artística comenzó a una muy temprana edad, compartiendo escenario con su talentoso padre, Chucho Gama y su hermano, Chadbi Gama, pero él lo llevado más allá, todo se lo debe a su carisma, su chispeante personalidad y su innegable talento para el baile que ha cautivado a millones de usuarios en dicha red social. El impacto de sus videos ha sido tal que la misma Shakira ha reportado sus bailes aplaudiendo su don para bailar.
Un joven como él hace lo mismo que muchos de su edad: comparte su estilo de vida, sus viajes, su familia, algunos proyectos laborales, pero lo que impacta es su aspecto atlético, compartiendo con humor sus rutinas de ejercicios, razón por la que es considerado el mariachi fitness de las redes sociales y con orgullo comparte el resultado de sus horas de gimnasio y una buena alimentación, aunque eso le ha valido precisamente algunos escándalos de los que ha salido bien librado.
Durante una breve visita a Cancún, evaluando proyectos, escuchando ofertas de empresarios y visitando amigos, coincidimos en una velada en la que no pude evitar un reclamo porque esta entrevista se la solicité in box hace tiempo, pero seguramente mi solicitud se perdió en su bandeja de entrada mientras que estaba en plano ascendente el tornado de emociones, entre seguidores, fans y detractores que lo mantienen ocupado, algunas veces respondiendo y otras veces dejándolos en visto.
Había una vez un niño que admiraba a su padre…
“El gusto por ser mariachi lo traigo desde niño, recuerdo que veía a mi papá en el programa de Paco Stanley me veía haciendo lo mismo; creo que, como todo niño, creces admirando lo que hace tu padre, si él hubiera sido dentista, seguramente yo también. A mí me parecía divertido verlo, además de que siempre me ha gustado la música. Soy Licenciado en Derecho, pero dejé de ejercer para dedicarme a lo que más me gusta. Todo comenzó en un curso de verano, empecé a bailar, luego llegó la actuación, el canto, posteriormente empezamos como bailarines en el Mariachi Gama 1000 y de ahí derivé en muchas cosas como actuación, conducción y hasta “encueratriz Carlota” me ha tocado hacer en algunos programas y revista”.
Te crees mucho o eres mucho…
“En este negocio definitivamente hay que serlo, sinceramente, muchas veces cuando uno se esfuerza y quiere llegar a nuevos retos, eso arrastra consigo una mala competencia y si uno no peca de soberbio, que yo lo llamaría amor propio, quizá mal dirigido, uno deja de creer en sus propios proyectos porque siempre habrá quien te diga que está mal eso o aquello, pero si tú no eres un poco soberbio nunca lograrás lo que quieres hacer; necesitas creer en ti mismo y a veces hasta ser presumido para que la gente vea que bien hechas, se pueden hacer muchas cosas”.
Amiguero, solitario o todo lo contrario…
“Este negocio me ha enseñado a disfrutar en compañía de mis triunfos, no es que sea avaro, sino ambicioso, siempre quiero más, ahora que me va bien en mis redes quiero más likes, o hacer un show en Estados Unidos, tener más seguidores, más fama, ganar más dinero… ¿Eso está mal? ¡Creo que no!”
¿Es fácil mantener la sonrisa 24/7?
“Claro que sí, pero soy muy enojón y soy de los que explotan, y cuando me lastiman, hiero, es porque así es como me estoy sintiendo y quiero regresarte todo el daño que me han hecho para que sientas cómo me siento; no soy muy bueno manejando la ira con las personas que me importan, pero cuando se trata de alguien que no me importa prefiero mejor darme la vuelta y que sólo haya un loco en la sala y no dos. No sé manejar ese tema, espero aprenderlo algún día”.
¿Cómo te consientes después de una larga jornada de trabajo?
“Me gusta trabajar mucho porque me encanta ir a lugares deliciosos donde me consientan, saber que el esfuerzo de mi trabajo es premiado con un buen tequila, un buen viaje, una buena atención en un restaurante, con buenos amigos y poderlos consentir yo también”.
En este campo, así como hay flores hay espinas, hay aplausos y hay envidias…
“Definitivamente, y sí, yo tengo envidia de muchas personas que han llegado a un punto de su vida por error y han sabido lidiar con él, algunos han tenido éxito, por ejemplo, alguien que tiene un embarazo no deseado, y gracias a eso su vida empieza irse para arriba, y ver cómo crece como familia, laboralmente y en muchos sentidos, esa envidia es de la buena… A veces he querido hacer las cosas siguiendo una estructura y no me salen…”
¿Cómo evitas caer en su juego o como asimilas los comentarios de los “haters”?
“A pesar de que los ´haters´ son muy necesarios para ver en dónde estás parado y hacia dónde estás mirando, son de ayuda a nivel redes sociales para que te hagas más viral; me da mucha flojera escuchar o leer sus comentarios, muchas veces es mala vibra de gente que no ha podido construir nada en su vida o está en una peor situación que la tuya, que sólo por el hecho de saber escribir se permite atacarte o más allá, incluso hasta tus seres queridos, eso me da mucha pereza. Creo que esa atención se le regala a la gente que te quiere, no a la que te quiere ver mal”.
Cuando se trata de gozar la vida, ¿qué eliges?
“Soy una persona muy abierta, me gusta todo, pero aprecio más una buena compañía porque una relación se construye desde yendo juntos al gimnasio, ir de viaje juntos, echarme un tequila y hasta pelear, una discusión no necesariamente es para ganar o salir de pleito, sino para intercambiar y compartir diferentes puntos de vista, pero luego viene lo mejor, la reconciliación; una persona así me vuelve loco, me gusta que una relación sea intensa, así deberían ser todas, porque esas son las relaciones que más te marcan, las intensitas, aunque a veces les digan tóxicas”.
¿Cuál ha sido el momento mediático más incómodo que has vivido?
“Cuando te digo que me gusta de todo, es que me gusta ser libre, antes de volverme mediático tenía en mis redes una o dos fotos de mis pompas y no pasaba nada, pero un día se desataron los comentarios en Instagram y me la bajaron, no sé por qué no lo hicieron antes si ya tenía tiempo ahí publicada; los que más se sorprendieron fueron los familiares de mi esposa, se hizo todo un escándalo en diferentes medios y contrario a lo que pudiera pensar, disminuyeron los likes, pero gané atención por otro lado y eso me ayudó de otra forma. Creo que si esa misma foto la sube una mujer con una mini tanga no pasa nada, pero a mí me fue como en feria y creo que no hay nada más bello que el cuerpo humano. Los de Instagram hasta me castigaron, pero vengo acostumbrado a los castigos desde la primaria”.
Actualmente estamos en espera de que anuncies algún proyecto nuevo, pues a tus seguidores les gustaría verte en distintas facetas dentro del medio artístico…
“No tengo idea qué seguirá en mi carrera, simplemente soy de las personas que se deja llevar. Espero que algún productor me quiera dar la oportunidad, de que me vean potencial. Soy de esas personas que le gusta aventurarse y nunca dice que no. Yo creo que es importante no rajarse y doy mi cien para lograrlo. Ya he sido animador, cantante, conductor, actor, locutor. No sé ni siquiera hacia dónde va encaminada mi vida profesional, que sea una sorpresa. ¿Qué pueden esperar de mí próximamente? Pues bueno, estamos trabajando en seguir formando parte del Mariachi GAMA 1000, ya sea como músico o vocalista, también estamos en la construcción de distintos espectáculos. Viene una nueva etapa en Jesús Gama, de hecho, nos vamos a quitar el junior ya, próximamente se queda como Jesús. Me verán en nuevos espectáculos, uno inclusivo. Andaré por Cozumel, si Dios quiere también en San Miguel de Allende. Y estamos buscando la oportunidad para brincar el Río Bravo y empezar a hacer carrera también en los Estados Unidos”.
¿Qué es lo que más te gusta de este acercamiento con la gente?
“Pues definitivamente el amor que el público me expresa, el cariño que me que me dan, es lo que me mantiene motivado a seguir adelante. Obviamente la compensación económica siempre ayuda, es maravillosa, no te lo voy a negar, pero el hecho de que la gente te admire, te pida una foto, te reconozca, le guste tu trabajo, o me digan que tengo mucho ángel, mucho potencial, siempre me motiva. Estoy decidido a seguir luchando y seguir creciendo, y así que como decía Chente: “mientras la gente no deje de aplaudir, yo no dejaré de intentarlo”.
